Derbi unicolor en Sacramento

El Isleño supera con claridad 4 – 0 al Atlético y mantiene su buen tono en la Liga.

Tercera jornada de liga en la Segunda Andaluza Juvenil, celebrada en el Campo Municipal Bazán, el pasado sábado 30 de septiembre de 2017, a las 18:00 horas bajo un sol de justicia.

El San Fernando C.D. Isleño pasó por encima del C.D. San Fernando Atlético en el llamado 'derbi cañaiña'. Desde el primer minuto de juego quedó patente la superioridad que actualmente, existe entre las plantillas de uno y otro equipo. Los toques de balón capitanearon la 'invasión' del Isleño sobre el área blanquinegra. Luis y Miguel, hasta en dos ocasiones, pusieron los goles.

En la primera parte. El partido fue un auténtico monólogo de los locales. El San Fernando salió a por el partido y el Atlético defendía el marcador inicial como podía. A excepción de un remate lejano, los visitantes estuvieron desaparecidos arriba. Poco a poco, los de Josemi, fueron encontrando la portería de Lorenzo y su juego fue teniendo mayor profundidad. Las llegadas tanto por las bandas, como entre líneas, marcaron el ritmo de las ocasiones. Miguel y Luis, con sus goles, ofrecieron la guinda.

En el minuto 13, el partido se rompió, tras el error del guardameta visitante, al no conseguir parar con los pies, la cesión de su defensor en el frontal del área, de lo que saco tajada Miguel para firmar el primero del partido.

A partir de ese momento, el Atlético no supo reaccionar y se fue apagando conforme pasaron los minutos. Los de Miguel Ángel, fueron de poco a nada y el Isleño lo aprovechó. En el minuto 40, de nuevo se dirigía el esférico, al fondo de la red, Luis remataba un saque de esquina.

Antes del pitido final del primer periodo, el San Fernando aún pudo aumentar la renta, pero erró un penalti. Y con resultado de 2 – 0, se dirigieron los contrincantes hacia vestuarios.

En la segunda mitad, el Atlético estuvo aún más desdibujado y el Isleño siguió avisando en cada acercamiento. No tardo mucho en caer el tercero, solo habían pasado cinco minutos de la reanudación, cuando de nuevo Luis, perforó la portería rival de libre directo, matando el partido.

De ahí hasta el final, más bien parecía que se estaba disputando, un partido de pretemporada, que uno de competición liguera. Los visitantes bajaron los brazos y con lo único que suspiraban era con qué, el cronómetro corriera lo más rápido posible. Mientras, los locales intentaban sacar provecho individualmente de cada instante para aumentar la renta, por ocasiones, no quedó.

Tuvimos que esperar hasta el minuto 88, para ver aparecer de nuevo a la alegría y la tristeza al mismo tiempo.
Y de certificar el triunfo se encargó Miguel, que controló un balón servido a la espalda de los centrales y en el mano a mano se impuso a Lorenzo, para dejar el 4 – 0, definitivo en el marcador.

En definitiva, un derbi felizmente desequilibrado en la hierba. Tres de tres y nueve puntos.










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