Arrancó el Juvenil “A” del San Fernando CD Isleño 2018-2019
Hoy, miércoles, se empezó a escribir el primer párrafo de la historia reciente del Juvenil “A” del cuadro isleño, tras su regreso once años después a Liga Nacional. El encargado de comandar la nave, Miguel Ángel Sánchez Reyes, vivió su primera toma de contacto con la inmensa mayoría de sus jugadores.
Vuelta al trabajo. Se acabaron las vacaciones. Se acabó la buena vida. La plantilla pone su mirada al comienzo de la temporada. A falta de poco más de un mes para el arranque, el equipo afronta un año tan ilusionante como exigente, en el que el nivel aumentará con respecto a la pasada campaña y la competitividad será máxima
Manos a la obra. Los integrantes de la plantilla del juvenil isleño volvieron a la rutina de trabajo. El cuadro azulino se ejercitó el miércoles 18 de julio de 2018, desde las nueve y media de la mañana, en las instalaciones de Gómez Castro. Con un entrenamiento suave bajo la batuta del nuevo técnico, se daba el primer paso de campaña con el inicio de la pretemporada y con un objetivo claro “la permanencia” en la categoría de plata juvenil.
La ilusión comanda los primeros compases de la primera sesión de trabajo. Los azulinos arrancan cargados de muchas ilusiones y motivaciones, un nuevo curso, sabiendo de las dificultades y competitividad de la segunda categoría juvenil a nivel andaluz.
Primer día y primera toma de contacto entre los jugadores que continúan con respecto a la pasada campaña, las nuevas incorporaciones y el cuerpo técnico. La pretemporada ha alzado el telón con la participación de veintiocho jugadores en un entrenamiento de trabajo físico post vacacional, primer contacto con el balón y los primeros sudores de la temporada.
Un cuerpo técnico que otorga plena confianza. El club isleño da continuidad al gran trabajo desarrollado por Miguel Ángel estos últimos años en el fútbol base gaditano. El tándem técnico se pone al frente del equipo, ante una ilusionante campaña, que tiene como principal objetivo amarrar la permanencia. La familia isleña se lo merece y por trabajo, intensidad, ganas y fútbol, de la mano de Sánchez Reyes y sus jugadores, no va a quedar.